- 1 Síntomas de un embrague roto
- 1.1 Ruido al pisar el embrague
- 1.2 Vibraciones en el pedal de embrague
- 1.3 El pedal del embrague se queda abajo
- 1.4 Pedal de embrague blando
- 2 Pedal de embrague duro
- 2.1 Olor a embrague quemado
- 3 Conducir con embrague desgastado
- 4 Qué pasa si se rompe el embrague del coche en marcha
La vida útil del embrague, como ocurre con otros componentes, depende del uso que le demos al vehículo y de nuestro estilo de conducción particular. Por lo tanto, no existe una estimación media que nos permita saber con seguridad si tenemos un embrague gastado.
Por ello, tendremos que prestarle atención a los síntomas que nos indican que tenemos que sustituir el embrague, como pueden ser que el embrague patina, un embrague duro, un embrague blando o que el embrague se quede atascado, por citar algunos de los problemas más comunes con este componente. En muchos de estos casos, será necesario adquirir un kit de embrague nuevo y realizar la sustitución.
Estos y otros indicios pueden levantar nuestras sospechas sobre un embrague roto, por lo que es realmente importante para el cuidado de nuestro vehículo estar familiarizado con ellos. Con este objetivo y otros, como prevenir su desgaste prematuro, ¡vamos a aprender un poco sobre ello!
Síntomas de un embrague roto
Normalmente, debemos prestar atención a los ruidos extraños, al comportamiento del pedal y al propio desempeño del embrague, pues esto ayudará a identificar el origen del problema en esta pieza esencial en la transmisión del movimiento del motor a las ruedas. A continuación, vamos describir los síntomas de un embrague gastado, así como sus posibles soluciones.
Ruido al pisar el embrague
Los chirridos y crujidos al pisar el embrague ayudan a descubrir el problema. Es posible que se escuche una especie de crujido en el momento de pisar el embrague. Si esto ocurre, es posible que el problema esté relacionado con el desgaste de la rótula de la horquilla de embrague. Por otro lado, si el sonido es más agudo y se parece más al de un grillo, es el rodamiento de empuje la pieza que se encuentra desgastada.
También suele ocurrir que el coche produzca mucho ruido con la transmisión en posición neutral pero que el ruido desaparezca al pisar el pedal de embrague. En este caso, es posible que el problema esté causado por un rodamiento del eje de entrada desgastado.
Otra causa para el ruido puede ser la de un cojinete piloto del embrague desgastado.
Los ruidos de roce metálico cuando se cambian las marchas, el deslizamiento del embrague, ocurren cuando el disco de embrague se queda activado o atascado, provocando que el eje de entrada siga girando incluso aunque se pise por completo el pedal de embrague. Este problema puede estar relacionado con la horquilla de embrague, que no permite el desacople completo del disco.
Vibraciones en el pedal de embrague
Las vibraciones del pedal de embrague pueden estar provocadas por diversas causas, tales como el desgaste del forro de fricción del disco de embrague, el forro de fricción del embrague está quemado o sucio por aceite, por deformaciones del plato de presión o del volante de inercia o por el desgaste del volante de inercia, por citar algunas.
También se pueden producir pulsaciones o temblor del pedal de embrague cuando una pieza giratoria vibra o se tambalea en el interior de la transmisión. Un volante de inercia deformado o una palanca de liberación mal ajustada o dañada pueden estar detrás de este problema.
El pedal del embrague se queda abajo
Igual que en el caso anterior, si el pedal de embrague se queda abajo, pueden haber problemas con el varillaje o con el cojinete de desembrague. Se deben comprobar los muelles del varillaje para ver que no se hayan dado de sí y ajustarlos si fuera necesario. Además, hay que comprobar el cojinete de liberación y, en caso de un vehículo con sistema hidráulico, el nivel del fluido.
Pedal de embrague blando
Un pedal de embrague demasiado flojo suele ser una señal clara de mal funcionamiento. En algunas ocasiones es posible que el problema no esté directamente en el embrague. En estos casos no será necesario llevar a cabo la sustitución completa del embrague, sino la reparación o la sustitución de alguna pieza en concreto.
Un pedal de embrague suelto o pedal de embrague blando puede deberse a varias causas. Entre las principales causas de embrague blando se encuentran el desgaste del disco de embrague, problemas con el cable del embrague o una fuga en el sistema hidráulico. Cuando el pedal de embrague está flojo, puede ser difícil cambiar de marcha correctamente.
El embrague blando después de cambiarlo es una queja común. Esto puede ocurrir si no se ha purgado correctamente el sistema hidráulico o si el nuevo embrague no está ajustado adecuadamente. Además, un embrague flojo puede indicar la presencia de aire en el sistema hidráulico, lo cual impide que el componente funcione de manera óptima.
Pedal de embrague duro
En el caso contrario al anterior, una dureza excesiva en el embrague puede ser señal de que el disco de embrague está excesivamente desgastado.
Un embrague duro en el coche puede ser una señal de diversos problemas mecánicos. Entre las principales causas de un embrague duro al pisar se incluyen el desgaste del disco de embrague, un cable de embrague oxidado o desgastado, y problemas con el sistema hidráulico del embrague. Si se percibe un embrague duro de repente, es posible que el resorte del plato de presión esté dañado o que haya una acumulación de suciedad y escombros en el mecanismo del embrague.
Otras posibles causas incluyen un fallo en la horquilla del embrague o en el rodamiento de empuje, lo cual puede dificultar el accionamiento del embrague y hacer que el pedal sea más difícil de presionar.
Olor a embrague quemado
El olor a embrague quemado surge cuando el embrague patina en exceso. Es posible detecetar el olor a quemado, parecido al de unos frenos sobrecalentados, al iniciar la marcha con el embrague gastado y que después este patine al mover el vehículo.
Si un embrague nuevo huele a quemado, puede deberse a un mal ajuste o instalación incorrecta. Este olor puede ser causado por que el embrague patina, cuando el disco no se acopla correctamente con el volante, generando fricción excesiva y calor.
Cuando uno piensa “mi coche huele a embrague quemado”, es posible que esté experimentando un desgaste prematuro del disco de embrague o que haya una fuga de aceite que contamine el disco, provocando que patine. Además, una conducción agresiva, como mantener el pie en el pedal de embrague o arrancar bruscamente, también puede causar este problema.
Los síntomas de embrague mal montado pueden ser variados y afectan el rendimiento del coche. Si se tiene un embrague nuevo y no entran las marchas, o piensa “he cambiado el embrague y no entran las marchas”, podría indicar problemas de instalación. Un embrague nuevo tiembla cuando hay un desequilibrio o una alineación incorrecta. Otros síntomas incluyen ruidos extraños al pisar el pedal, falta de respuesta y dificultad para cambiar de marcha.
En caso de haber sustituido el embrague recientemente, es normal descubrir que el embrague nuevo hace ruido. Para que el proceso de acomodamiento se produzca adecuadamente, conviene circular relajadamente durante los primeros 250 km después de la instalación del nuevo componente.
Conducir con embrague desgastado
No se puede conducir con el embrague roto. Conducir con el embrague desgastado provoca rozamiento con otras piezas y posibles daños en estas, además del peligro físico que presenta para las personas. Hay que dirigirse a un taller para reparar esta avería de inmediato.
Además, un embrague desgastado pierde su capacidad para acoplar y desacoplar el motor de la transmisión de manera eficiente, lo que resulta en un deslizamiento del embrague. Esto puede hacer que el coche tenga dificultades para acelerar y cambiar de marcha, ya que el disco de embrague no agarra bien. Por otro lado, puede percibirse un olor a quemado debido a la fricción excesiva y el calor generado.
Ignorar estos síntomas puede provocar un daño mayor en el sistema de transmisión y la necesidad de reparaciones costosas. Un embrague en mal estado también puede comprometer la seguridad al conducir, especialmente en situaciones que requieren cambios rápidos de marcha.
Qué pasa si se rompe el embrague del coche en marcha
Cuando se rompe el embrague en un coche, hay grandes problemas. Este tipo de fallo en el embrague hará que este se hunda y ya no se tenga ningún control sobre la caja de cambios y el vehículo puede quedar inmovilizado, dependiendo de la gravedad de la rotura. Es posible notar que el pedal del embrague se siente suelto o va hasta el fondo sin resistencia, y el motor podría seguir funcionando, pero el coche no se moverá al acelerar.
En esta situación, la conducción se vuelve peligrosa, especialmente si uno está en una carretera transitada, ya que no se puede controlar adecuadamente el coche. Además, se podría causar daños adicionales al sistema de transmisión al intentar forzar el vehículo. Es absolutamente necesario detenerse de manera segura y solicitar asistencia de emergencia para evitar accidentes y daños mayores. La prevención a través de un mantenimiento regular del embrague es clave para evitar estas situaciones.
- @user_90989821.12.2023 15:48Miembro
Buenos días;
Cuando estoy estacionado con el motor encendido, siento que hay una vibración por el motor, y cuando pongo el pie en el embrague deja de sonar, solo tengo que tocar el pedal ni siquiera presionar.
Podría ayudarme con algún posible diagnostico?
Muchas gracias por su ayuda - @Andrea Moreno09.01.2024 07:19Miembro
Puede haber muchas razones y sin un diagnóstico adecuado no podremos aconsejarle nada, comuníquese con el servicio.
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