Compresor de aire para coche: cómo funciona, cómo detectar fallos y saber si está dañado

Compresor de aire acondicionado coche

El confort en el interior del automóvil depende del aire acondicionado, tanto en invierno como en verano. Mantener la cabina a una temperatura agradable es algo básico para el bienestar del conductor y demás ocupantes. El compresor del aire acondicionado del coche hace posible su funcionamiento.

Pero ¿qué pasa cuando el aire acondicionado no funciona? Si nos ocurre esto, posiblemente queramos solucionarlo de inmediato para seguir conduciendo cómodamente. En muchas ocasiones, el componente responsable de los fallos del aire acondicionado es el compresor.

Si tenemos la mala suerte de que el aire acondicionado del coche ha dejado de funcionar, le interesará saber por qué ha ocurrido esto y cómo diagnosticar el origen de la avería. En este artículo, revisaremos su importancia, por qué falla el compresor del aire acondicionado y cómo solucionarlo. ¡Vamos a ello!

¿Qué es el compresor del aire acondicionado del coche?

Qué es el compresor del aire acondicionado del coche

El compresor del aire acondicionado del coche es un componente mecánico que pone en circulación el gas refrigerante a alta presión por todo el sistema de refrigeración. Su función principal consiste en comprimir el gas, aumentando así su temperatura y permitiendo su posterior condensación en estado líquido para enfriar el aire que entra en el habitáculo.

Esta pieza suele accionarse mediante una correa conectada al cigüeñal del motor y solo se activa cuando encendemos el aire acondicionado. Si el compresor falla, puede provocar la pérdida de capacidad refrigerante e incluso dañar otros componentes del sistema.

¿Dónde está el compresor del aire acondicionado del coche?

El compresor del aire acondicionado está situado en la parte frontal del vehículo, dentro del compartimento del motor. Generalmente, se ubica cerca de otros componentes auxiliares, como el alternador o la bomba de dirección asistida, con los que comparte la correa impulsada por el cigüeñal.

Su ubicación exacta puede variar según la marca y modelo del automóvil, aunque habitualmente es fácil de identificar siguiendo la ruta de la correa mencionada. Esta posición permite que las tareas de mantenimiento, inspección visual o reemplazo puedan realizarse con relativa facilidad.

El compresor de aire acondicionado automotriz se encuentra ubicado en el bloque motor, sujeto por unos anclajes de barra o de orejas.

Funcionamiento del compresor del aire acondicionado del coche

El compresor es el encargado de poner en marcha todo el proceso al movilizar el gas por el circuito. Una vez comprimido, el gas alcanza un nivel de alta presión y temperatura, y se dirige al condensador, donde se enfría con la ayuda del aire exterior y se transforma en líquido.

A continuación, el refrigerante atraviesa la válvula de expansión, donde disminuyen su presión y temperatura. Así llega al evaporador, donde absorbe el calor del aire del habitáculo y lo enfría. Finalmente, el gas regresa al compresor y el ciclo vuelve a empezar.

  • i Permite que el líquido refrigerante se mueva por el circuito del aire acondicionado.
  • i Realiza la compresión del fluido.
  • i Sube la temperatura y la presión del refrigerante.

El compresor del aire acondicionado del auto funciona con electricidad, accionado por la correa del alternador. Por lo tanto, los fallos en los componentes de la instalación eléctrica, como la batería o el propio alternador, pueden provocar que el compresor del aire acondicionado deje de funcionar.

Partes de un compresor de aire acondicionado de coche

Para entender el funcionamiento del compresor, es importante conocer los componentes que lo forman y la función de cada uno. A continuación, te detallamos las partes más relevantes:

  • El cuerpo: aloja los componentes internos esenciales. Está compuesto por la polea, la bobina y el plato de accionamiento, que transmiten el movimiento al sistema.
  • La tapa: asegura el cierre hermético del compresor. Evita fugas, así como la entrada de polvo o humedad al interior.
  • El electroembrague: actúa como nexo entre el motor y el compresor. Transmite la energía desde el cigüeñal al cuerpo del compresor cuando se activa el aire acondicionado.
  • Pistones o rotores: según el tipo de compresor, estos comprimen el gas para que continúe su recorrido por el sistema.
  • Válvulas internas: regulan el paso del gas refrigerante durante el proceso de succión y descarga.

Aunque el sistema completo del aire acondicionado incluye más componentes, aquí nos centramos exclusivamente en las piezas que forman parte del compresor.

Tipos de compresor para aire acondicionado de coches

Según su diseño y funcionamiento, existen varios tipos de compresores utilizados en sistemas de aire acondicionado para automóviles:

  • i Rotativo de espiral (scroll): usa dos espirales, una fija y otra móvil, para comprimir el gas. Es eficiente y silencioso, habitual en coches modernos.
  • i Rotativo de tornillo: emplea dos rotores que giran en sentidos opuestos. Ideal para mover grandes volúmenes de gas.
  • i De pistón rodante: tiene un rotor excéntrico que comprime el gas dentro del estator. Equilibra tamaño y rendimiento.
  • i Centrífugo: utiliza la fuerza centrífuga para aumentar la presión. Alcanza hasta 30 000 rpm y está pensado para grandes cargas de refrigerante.

La elección depende del tipo de vehículo, el sistema de climatización y la eficiencia deseada.

Síntomas de avería en el compresor del aire acondicionado del coche

Cuando el compresor empieza a fallar, es habitual que el sistema de aire acondicionado muestre ciertos signos fácilmente reconocibles. Algunos de los más frecuentes son:

  • i El aire no sale frío, incluso cuando el sistema está encendido al máximo.
  • i Ruidos extraños al activar el aire acondicionado, como golpes o chirridos poco habituales.
  • i El compresor no se activa o lo hace de forma irregular.
  • i Fugas visibles de gas o aceite en la zona del compresor.
  • i Pérdida de rendimiento general del sistema, acompañado a veces de un mayor consumo de combustible.

Detectar estos síntomas a tiempo es clave para evitar daños mayores y asegurar el buen funcionamiento del sistema de climatización.

Averías del compresor del aire acondicionado del coche

Las averías en el compresor del aire acondicionado son una de las causas más frecuentes de fallo en el sistema de climatización del coche. Entre los problemas más comunes se encuentran el desgaste de piezas como la polea, el embrague o los rodamientos, que puede provocar ruidos anómalos o que el compresor se bloquee.

También pueden aparecer fugas de gas refrigerante, ya sea por juntas en mal estado o por pequeñas grietas en las conexiones. En otros casos, el fallo viene por una mala lubricación: si el compresor no tiene el aceite adecuado o se ha perdido por el uso, puede sobrecalentarse y dañarse.

Además, en modelos más modernos, el fallo puede estar en el sistema eléctrico o en el electroembrague, que impiden que el compresor se active correctamente.

¿Cómo saber si el compresor del aire acondicionado del coche está dañado?

Para saber si el compresor está dañado, primero hay que comprobar si el aire acondicionado enfría correctamente. Si no es así, conviene encender el sistema y prestar atención al sonido del motor: un compresor en buen estado suele emitir un clic o zumbido leve al activarse.

También se puede abrir el capó y revisar visualmente el compresor, comprobando que no haya cables sueltos, quemaduras o fugas. Si el compresor no se activa, hace ruidos anómalos o muestra signos de desgaste externo, es probable que esté averiado y requiera revisión en un taller especializado.

Si hemos detectado que el aire acondicionado ya no funciona bien, tenemos la posibilidad de realizar un diagnóstico sencillo para saber si se trata efectivamente de una avería del compresor.

 Para confirmarlo, procederemos del siguiente modo: 
  1. Arrancar el coche y dejar que se caliente. Cuando lo haya hecho, encendemos el aire acondicionado y lo ajustamos para que enfríe lo máximo posible, lo cual debe provocar que se escuche el ruido del compresor. Si el compresor del aire acondicionado arranca y se para, o simplemente no lo hace, apagaremos el coche y esperaremos a que se enfríe el coche.
  2. Abrir el capó y examinar el compresor. Revisaremos todas las conexiones de los cables y nos aseguraremos de que están bien; también observaremos que no se perciban quemaduras u otro tipo de desperfectos a simple vista. En caso de que algún cable no esté bien conectado al compresor, se conecta y se enciende de nuevo el sistema para ver si ahora funciona correctamente.
  3. Si nos damos cuenta de que el compresor no hace ruido u observamos que se ha quemado, tendremos que acudir a un taller mecánico para su reparación o sustitución.
  4. Si tenemos dificultades para escuchar el ruido del compresor del aire acondicionado en funcionamiento, podemos contar con la ayuda de otra persona para que arranque el automóvil mientras observamos con el capó abierto si efectivamente el compresor se enciende. En caso de que no lo haga, acudiremos también a un especialista para que haga un diagnóstico exhaustivo de la avería y tome las medidas oportunas para solucionarla.

Este es un procedimiento sencillo para comprobar un compresor de aire acondicionado del coche.

 Si el compresor del aire acondicionado hace ruido y se enciende, pero no funciona, la avería puede encontrarse en alguno de sus componentes: 
  • ! Desgaste de algún componente. La polea, el balero y la bobina pueden averiarse.
  • ! Lubricación deficiente. El aceite puede evaporarse o fugarse; conviene utilizar un lubricante adecuado.
  • ! Sobrecalentamiento. Se produce por fugas de gas o porque tenemos una presión de admisión muy alta.

Por qué nunca debes apagar el coche con el aire acondicionado encendido

Apagar el coche sin antes desconectar el aire acondicionado es algo común, pero poco recomendable. Al hacerlo, se queda humedad en los conductos, lo que favorece la aparición de moho, malos olores e incluso la corrosión de algunas piezas internas con el paso del tiempo.

Además, cortar el funcionamiento del compresor de forma repentina (sin dejar que se desactive correctamente) puede afectar al electroembrague y reducir la vida útil del sistema. Por eso, lo más aconsejable es apagar el aire acondicionado unos minutos antes de parar el motor. Así se ayuda a eliminar la humedad y se protege todo el sistema de climatización.

Por qué es necesario revisar y mantener regularmente el compresor del aire acondicionado

Revisar y mantener el compresor del aire acondicionado de forma periódica es fundamental para asegurar su buen funcionamiento y evitar averías costosas. Lo ideal es hacerlo al menos una vez al año, preferiblemente antes del verano, cuando el sistema trabaja con mayor intensidad.

Durante la revisión, se comprueba el nivel de gas refrigerante, el estado del aceite lubricante y la presencia de fugas o desgastes en componentes clave. Un mantenimiento adecuado no solo mejora el rendimiento del compresor, sino que también previene sobrecalentamientos, ruidos anómalos y fallos en el sistema eléctrico.

Si el compresor de aire acondicionado arranca pero no enfría, puede que haya alguna fuga en el sistema u otro problema, como la válvula de expansión. Los fallos en el sistema del aire acondicionado ocurren también por falta de mantenimiento.

 Por esto, conviene llevar un mantenimiento oportuno: 
  • i Encender el aire acondicionado de vez en cuando. Esto debe hacerse por lo menos una vez cada mes, independientemente de en qué época del año nos encontremos. Así, evitamos que se desarrollen bacterias en él.
  • i Comprobar los conductos y los filtros. Se debe comprobar que no se encuentren obstruidos por la suciedad.
  • i Sustituir el filtro regularmente. De esta manera, evitaremos problemas como los malos olores o el desarrollo de partículas perjudiciales que pueden transmitirse por el aire.

Siguiendo estos sencillos consejos, reduciremos la posibilidad de que se produzcan daños en el compresor del aire acondicionado, alargaremos la vida útil del componente y procuraremos un funcionamiento óptimo del mismo, sin fallos y sin complicaciones.

¿Cuánto cuesta cambiar el compresor del aire acondicionado del coche?

Cambiar el compresor del aire acondicionado del coche puede suponer un gasto considerable, ya que el precio suele oscilar entre 400 y 800 euros, dependiendo del modelo del vehículo, la marca del compresor y la mano de obra del taller. En coches de gama alta o con sistemas más complejos, el coste puede ser incluso mayor.

En algunos casos, si el compresor presenta daños leves, es mejor optar por repararlo, ya que es más económico. Sin embargo, cuando el desgaste es significativo o afecta a varios componentes, lo más recomendable es la sustitución completa.

Comentarios - 1

  • @user_263181
    21.09.2022 18:42
    Miembro

    Al dejar el coche en marcha con la radio y las luces de emergencia puesta, me descargo la batería del coche.

    Después intento de arrancar el coche y no se podía. Al arrancar el cuadro eléctrico hice varios reinicios.

    Ahora ya no me enfría el aire condicionado.

    Es porque se ha estropeado el compresor?

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