Un neumático con una presión de inflado incorrecta es tan peligroso que puede poner en peligro su vida al desestabilizar el vehículo durante la conducción. Además, comprobar la presión neumático es muy sencillo y rápido, por lo que podrá hacerlo las veces que sea necesario.
Un buen conductor debe saber que la presión de inflado de un neumático se comprueba periódicamente para evitar complicaciones. No obstante, la mayoría de ellos no le otorgan la importancia que merece: la presión de un neumático juega un papel fundamental a la hora de prevenir accidentes y averías.
Para que no descuide algo tan importante como cuidar la presión ideal neumáticos, a continuación le ofrecemos toda la información relevante al respecto.
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¿Cómo afecta la presión de los neumáticos a la conducción?
La presión de inflado de un neumático se comprueba no solo como una cuestión de mantenimiento, sino que debemos hacerlo como una rutina para circular en óptimas condiciones y minimizar así las posibilidades de sufrir un percance.
Y es que conducir con la presión neumático coche incorrecta perjudica la seguridad de los neumáticos aunque estos se encuentren en perfecto estado. Circulando así, no podrán cumplir con total eficacia su cometido y la seguridad en la conducción puede verse comprometida.
Por si todavía tiene dudas al respecto, las funciones de los neumáticos en el comportamiento dinámico del vehículo y las razones por las que siempre debe mantenerlos en perfecto estado, son las siguientes:
- i Soportan todo el peso del vehículo.
- i Son los encargados de generar el esfuerzo preciso para acelerar y frenar en condiciones normales así como en situaciones de emergencia o condiciones adversas.
- i Desarrollan la fuerza necesaria para trazar las curvas y variar la dirección del coche a voluntad del conductor y por medio del volante.
- i Son el principal y único punto de fricción, y por ende de unión, entre el vehículo y el asfalto o el terreno sobre el cual se circula.
- i Los neumáticos absorben y amortiguan cualquier posible irregularidad del terreno con la intención de facilitar la conducción y mejorar el confort dentro del vehículo.
- i Reducen las posibilidades de que se produzca el peligroso efecto aquaplaning sobre el pavimento mojado cuando se circula bajo la lluvia.
Todas estas funciones se pueden ver alteradas, en mayor o menor medida, cuando los neumáticos están muy desgastados, han perdido su flexibilidad, están cuarteados o presentan un exceso o falta de presión de aire.
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Qué sucede si la presión de un neumático no es la adecuada
Un neumático con una presión de inflado incorrecta desencadenará una gran cantidad de consecuencias que pueden llegar a ser desastrosas.
Estas son las más habituales:- ! El vehículo se volverá menos estable en el trazado de las curvas sin la presión de neumáticos recomendada. Tanto la falta como el exceso de presión, harán que la rigidez lateral de la rueda sea incorrecta, lo que supondrá mucho más esfuerzo a la hora de mantener la trayectoria del vehículo.
- ! Se incrementará el riesgo de sufrir aquaplaning, incluso a bajas velocidades. No olvidemos que esta es una situación muy complicada, pues conlleva la pérdida total del control del vehículo.
- ! Aumentará también el consumo del coche, ya que una presión errónea sobre terrenos duros acrecentará la superficie de contacto entre la calzada y el neumático. Como consecuencia, su vehículo necesitará más combustible para lograr mantener un rendimiento similar.
- ! Se intensifica la distancia de frenada, por lo que se aumentan las posibilidades de sufrir un impacto. Sin una presión ideal neumáticos, el vehículo no frenará de forma eficaz, de modo que necesitará mayor distancia para detenerse. Esto supone un riesgo muy elevado al volante.
- ! Por último, el desgaste de los propios neumáticos también será mayor. Conducir con mayor o menor presión de la recomendada provocará que las ruedas se desgasten mucho antes, por lo que tendrás que cambiarlas antes de tiempo.
¿Cuál es la presión de neumáticos recomendada?
No hay una presión ideal neumáticos universal aplicable a todos los vehículos. De hecho, un mismo coche necesita una presión distinta según las circunstancias. Puede ser necesario aumentarla o disminuirla según la situación. Por ejemplo, la carga o la temperatura influyen en la presión de los neumáticos.
Por esto, cada conductor debe saber cuál es la presión máxima de un neumático y también la recomendada para su coche. Normalmente, viene indicada esta información en el manual del vehículo. También suelen indicarse consejos sobre la variación de presión recomendable y en función de los factores que debe modificarse.
Comprobaremos la presión de los neumáticos en frío para una mayor precisión, ya que el rozamiento con la carretera genera calor y hace aumentar la presión del neumático falseando el valor de la medición. Para una lectura lo más precisa posible, se comprueba la presión de los neumáticos por la mañana, cuando el coche lleve unas cuantas horas en reposo.
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Cómo medir y rectificar la presión de los neumáticos
Comprobar la presión neumático de repuesto también es importante, así en caso de pinchazo podrá cambiarlo y conducir como si nada hubiese ocurrido. En cuanto a cómo medirla, existen medidores presión neumáticos, manómetros, que son instrumentos de medición empleados para tal fin.
Puede comprar uno de estos medidores, acudir a una gasolinera o llevarlo a su taller de confianza para comprobar la presión ideal neumáticos. Medir la presión neumático coche es una tarea fácil que puede hacer cualquiera, sin experiencia ni conocimientos de mecánica.
Solo siga los siguientes consejos:- i Mida la presión de un neumático siempre con el coche parado, apagado y en frío. Es aconsejable hacerlo antes de arrancar el coche y sin recorrer ni un kilómetro.
- i En primer lugar, desenrosque el tapón de la rueda con cuidado para colocar la manguera del manómetro. Encaje con precisión la boquilla del aparato a la válvula de inflado de la que ha retirado el tapón. Hágalo firmemente, pero sin forzarlo.
- i La pantalla de los medidores presión neumáticos puede ser analógica o digital, así que compare la que indica el manómetro con la que aconseja el fabricante de su vehículo como idónea y haga que coincidan.
- i Si fuera necesario, puede llenar o vaciar las ruedas de aire con el manómetro. Para ello, solo tiene que pulsar los botones apropiados para aumentar o disminuir la cantidad de aire de las ruedas hasta llegar a la presión correcta.
- i Cuando el manómetro muestre el valor deseado, suelte la manguera y cierre la válvula con el tapón que ha retirado antes. Realice la misma operación con las demás ruedas del coche.
Para finalizar, le recomendamos que compruebe una vez al mes si su vehículo circula con una presión ideal neumáticos. Si no lo hace así, al menos compruébelos antes de salir de viaje y aproveche las revisiones periódicas de su vehículo para también comprobar la presión de los neumáticos.
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