Manuales y vídeo tutoriales para cambiar los Aceite de Transmisión y Aceite de Diferencial por su cuenta

La principal función del aceite que se utiliza en las cajas de transferencia, en las cajas de cambio manuales y en los diferenciales es la de lubricar las partes móviles de estos mecanismos. Protege a los elementos que están en contacto del desgaste abrasivo y del roce. Gracias a la lubricación, estas piezas se deslizan con mayor suavidad, lo que contribuye a una mejor eficiencia del consumo de combustible del vehículo. Además, el aceite permite eliminar el calor y los productos de desgaste de los pares de fricción, mientras que la película aceitosa que se forma en la superficie también previene la corrosión.

El aceite de transmisión realiza las mismas funciones en transmisiones automáticas y se utiliza también para transmitir el par del volante de inercia del motor a los ejes de la caja de cambios.

Es recomendable cambiar el aceite de los engranajes de las cajas de las cambios manuales en promedio cada 90.000 y 100.000 km recorridos. La vida útil del aceite de las cajas de cambios semiautomáticas es más corta, aproximadamente de 50.000 a 60.000 km. Si el vehículo se utiliza en condiciones adversas, por ejemplo, en condiciones fuera de carretera, tendrá que cambiarlo con más frecuencia. En cualquier caso, el intervalo de sustitución ha sido establecido por el fabricante y viene especificado en el manual del propietario del vehículo. En las transmisiones automáticas, los tirones durante el cambio de marchas pueden indicar que hay que cambiar el aceite de la transmisión.

Con el paso del tiempo, el aceite de transmisión se oxida, lo que acaba afectando negativamente a sus propiedades lubricantes y anticorrosivas. Además, se contamina con las virutas metálicas que tienen un efecto abrasivo y aceleran el desgaste de las piezas. Realizar derrapes con las ruedas de manera habitual puede hacer que se acumulen depósitos de carbono en él. Todo esto da lugar a un rápido desgaste de los elementos de la transmisión, además de reducir la eficiencia en el uso de combustible del vehículo y la facilidad para cambiar de marcha.

El aceite de la transmisión nuevo suele ser rojo, amarillo o naranja. Sin embargo, durante su funcionamiento puede volverse rojo oscuro o marrón. El oscurecimiento del aceite de transmisión no siempre es un indicativo de su mal estado. Si tiene un aspecto transparente, sin su distintivo olor de quemado, sin contaminantes e impurezas visibles, todavía puede ser usado. Y viceversa, un aceite turbio y oscuro con un fuerte olor a quemado e impurezas mecánicas visibles indica que el aceite debe ser sustituido de inmediato, además de ser un indicio de averías de la caja de cambios.

Los tirones al cambiar de marcha, el olor a quemado, el deslizamiento de los engranajes (los elementos de fricción de la transmisión resbalan), sonidos extraños, así como un cambio de marchas retrasado o espontáneo, pueden indicar un bajo nivel de aceite de transmisión en las transmisiones automáticas. En vehículos de tracción trasera, cuando se conduce cuesta arriba o se acelera, puede llegar a entrar aire en los conductos de aceite. Como resultado, la presión del aceite se reduce, se corta la conexión con el motor y el vehículo se ralentiza. Un nivel insuficiente de aceite puede incluso provocar que el motor se detenga. En ocasiones, el motor continúa funcionando, aunque el coche no se mueve.

Un bajo nivel de aceite de transmisión en cajas de cambio manuales produce tirones, grietas y vibraciones durante el cambio de marchas.

Debe comprobar el nivel de aceite de transmisión para asegurarse de que el problema no está ocasionado por un bajo nivel de aceite de transmisión. Los vehículos con transmisiones automáticas suelen venir equipados con una varilla de medición para este fin. En otros vehículos, hay que desenroscar el tapón de llenado que se encuentra en el cárter de aceite de transmisión. El tapón de llenado de los vehículos con cajas de cambios manuales puede estar montado detrás de la rueda delantera izquierda. Debe consultar el manual del propietario del automóvil para obtener unas instrucciones más detalladas sobre cómo comprobar el nivel de aceite de su coche.

Sí, se trata de un procedimiento que resulta bastante laborioso y que en la mayoría de los casos requiere utilizar un equipamiento especial. Además, la caja de cambios debe ser lavada antes de añadir aceite de transmisión nuevo, para limpiar los residuos, los depósitos de carbón y los productos de desgaste de los elementos de contacto. Se utilizan aditivos especiales para esta finalidad.

La duración de este procedimiento depende del tipo de cambio de aceite que se haga: este puede ser parcial o completo. El primero implica drenar sólo una cantidad del aceite. Se tarda aproximadamente 1 hora y no se necesitan dispositivos especiales. No obstante, un cambio parcial es menos eficiente. El cambio de aceite completo requiere un equipo especial y su realización tarda unas 3 horas.